Vivimos en la
era de la información, tecnología y comunicación.
Tenemos a
nuestro alcance un sinfín de fuentes que podemos buscar antecedentes, datos y
cifras sobre cualquier tema de nuestro interés.
El fácil acceso
a esta gran cantidad de información constituye un reto, pues corremos peligro
de perdernos en un mar de datos que nos confundan en vez de aclararnos el
panorama.
Debemos
desarrollar habilidades de investigación para seleccionar exclusivamente datos
que son valiosos para tomar una decisión y desechar los que nos confunden o
distraen de nuestros verdaderos objetivos.